miércoles, 21 de mayo de 2014

El Power Ranger amarillo

Cierro la puerta con llave. Le doy dos vueltas a la cerradura para asegurarme de que está bien cerrada. No me fío de nadie. En la zona hay mucho yonki y puede que algún día no tengan dinero y decidan entrar en casa para robar.

No sé a dónde voy. He salido de casa sin rumbo y siempre que lo hago me acuerdo de Augusto Pérez, el protagonista de Niebla. Él salió de casa y por delante se le cruzó una mujer de la cual se enamoró instantáneamente y decidió seguirla. Abro la puerta del portal y lo único que pasa es una china fea que me hace abandonar la idea de seguir el ejemplo de Augusto.